Si desean realizar alguna petición, sugerencia o crítica, no duden en enviarla por correo a zenrok.daikur@hotmail.com

Como peticiones acepto:
- Poesías o cartas que quieran expresar algo.
- Un relato de algún género en especial (no importa cuál, solo pidan).

Gracias por su tiempo y disfruten.

lunes, 9 de enero de 2012

Capítulo 1: Vientos de tranquilidad

Era un apacible día de otoño. El viento mecía suavemente las hojas de los árboles mientras una dulce melodía resonaba entre los muros de la aldea. El Sol se deslizaba lentamente por el cielo mientras las nubes se dejaban llegar a su compás por el cada vez más oscuro cielo. El fuego del centro de la aldea crepitaba rodeado de la alegría de los festejos de la captura del día. La carne crujía al asarse y las jarras corrían de mano en mano nada más llenarse. La suave voz femenina que entonaba El cantar del viento se mezclaba con la increíble tranquilidad del ambiente y sus versos llenaban de un gozo indescriptible los oídos de los presentes.

Miren el cielo brillar al son de mi voz
contemplando las estrellas nacientes
y la Luna vigilando la paz del mundo.
Vean al viento llevar un tierno mensaje 
repleto de amor y rebosando armonía
a cada rincón de estas tierras.
Acompaña las fiestas de cada día
entre espirales meciendo los árboles
y llenando los corazones de alegría...

La mujer cantaba acompañada de tres instrumentos sencillos, apenas perceptibles al fusionarse con su impresionante voz. El jefe de la aldea presidía el banquete justo enfrente del espectáculo rodeado de sus sabios consejeros, siempre interrumpido por halagos y corteses saludos. Todos en la aldea debían agradecimiento a su líder, quien les permitió llenar sus despensas y sus carteras. La buena gestión en los asuntos del pueblo incrementó por igual la fama del mismo y en poco tiempo comenzaron a llegar correos de sus vecinos pidiendo consejo. Este día se celebró una caza de jabalíes conjunta entre las villas de la colina, un conjunto de cinco pueblos que parecían haber alcanzado un acuerdo tras varias generaciones de rencillas y problemas.
Entre las condiciones figuraban varios tratados comerciales, la formación de un ejército común, la delimitación de fronteras, terrenos de caza y terrenos de cultivo, la creación de un grupo de mandato que debatiese los asuntos comunes y la unión permanente de as aldeas tras varios casamientos entre gentes de unas y otras. Esa noche sería recordada como el inicio del país Kratuk, un pacífico comienzo que para nada sería el buen augurio de lo que llegaría a ser en el futuro. 

A la mañana siguiente se celebró la primera reunión de líderes para decidir el nombramiento de máxima autoridad y representante del pacto. Por unanimidad eligieron al artífice de tan importante alianza, Hillion el grande. Su gigantesco cuerpo impresionaba por sí solo, pero era mucho más temible su aguda inteligencia, capaz de organizar todo tipo de formaciones a la vez que discurría con las mejores soluciones ante todo problema que se le presentaba. Su afán guerrero se demostró desde el primer día y su capacidad de líder se plasmó en el corazón de todos cuando gracias a él fueron desbaratadas una incursión tras otra. Pulió su cuerpo a base de entrenar y compartir su experiencia combativa con las jóvenes promesas de la aldea. Sus ideales eran mantener bien entrenados y con una buena disciplina a todos los varones de la aldea.
En esa misma reunión se anunció la boda entre la cantante y el guerrero. El nombre de ella era Nympha y su escultural cuerpo apenas se resintió del embarazo que tuvo a los pocos días de la boda. Fueron años de festejos y celebraciones, alegrías y felicitaciones, años que pasaron como un soplo de viento en aquel ya lejano día de otoño.

El fruto del fornido guerrero Hillion, de melena negra entrecruzada de pequeñas hebras blancas hasta los hombros, tez dorada bajo las largas horas de entrenamiento al aire libre, penetrantes ojos oscuros brillantes de pura inteligencia y ágiles movimientos y de la esbelta cantante Nympha, con su cabellera rubia hasta su cintura, ojos verdosos como el mar, músculos marcados bajo la tersa y morena piel y suave y dulce voz nacida de su corazón fue un tierno niño al que llamaron Alkains...


Continuará

No hay comentarios:

Publicar un comentario